La Plata va “hacia la normalización del funcionamiento de todo”, dijo ayer en la conferencia de prensa el gobernador, Daniel Scioli, al delimitar una nueva “etapa”. También agradeció las innumerables donaciones pero pidió un “impasse hasta tanto (con) el relevamiento casa por casa, en cada una de las escuelas, en cada uno de los hospitales, vayamos identificando las nuevas necesidades que puedan surgir”.
En ese mismo mensaje, Scioli se refirió a la cuestión de las “víctimas fatales de este desastre”, que calificó como “un tema muy sensible, muy grave”. Admitió que hubo “37 fallecidos más” esos días pero “por otras causas no traumáticas o enfermedades previas”. Y sostuvo que se busca a una sola persona: Nilda Luján Godoy.
La instalada polémica por las personas muertas a causa de las inundaciones es cuantitativa y cualitativa: se discute en la ciudad —y se traduce en cruces virulentos entre funcionarios judiciales y del Ejecutivo— cuántas personas efectivamente murieron, se pide claridad en los criterios de admisión en el listado y se cuestionan algunas desprolijidades de la nómina que el gobierno cerró hace varios días en 51 adultos pese a que ya son varios los casos que claramente deberían integrar el listado. Entre otros de los ya difundidos, están el de Ada Teresa Rodríguez, de Tolosa, y el por ahora incomprensible caso de Cristian Mendoza, un joven que murió con sus abuelos (Feliciana Garay Ruiz, de 64 años, y Fernando Mendoza, de 70, ambos en la lista oficial de fallecidos) en circunstancias dramáticas durante el temporal pero no ingresó a dicha nómina. Sus abuelos fueron velados e inhumados en el cementerio local. A Cristian “querían llevarlo a Paraguay”, reconstruyeron en la casa fúnebre (Ver «Murió de susto cuando volvió el agua»).
En tanto, ayer por la tarde, el juzgado en lo Contencioso-Administrativo Nº 1, a cargo de Luis Federico Arias, comunicó la “constatación de una nueva víctima del temporal (…) sin perjuicio de otros casos relevados, cuyos resultados serán revelados a la brevedad”. “La víctima 52”, como empezaron a llamar algunos medios ayer, es Juan Carlos García, que también murió el 3 de abril “de un modo traumático como consecuencia del temporal acaecido en ésta ciudad el día 2 de abril del corriente”, según el comunicado judicial, que remite a “pruebas recolectadas en la causa N° 27.014: Defensoría Oficial de Responsabilidad Juvenil s/ Diligencia Preliminar’, en trámite en el juzgado del Dr. Arias.
El diario La Nación, en su nota de hoy reconstruye las circunstancias de la muerte de García: que vivía en 22 y 34, que con su mujer se asustaron cuando el agua les llegó a la cintura y salieron para cruzar y llegar a la vivienda de dos plantas de un vecino. Ella no pudo llegar y se aferró a la reja de la casa; él “se tomó de un poste pero la corriente se lo llevó. Apareció en 21 y 33. Lo encontró su hija. Estuvo cinco horas esperando que le entregaran el cuerpo, pero nadie apareció”, le dijo a ese diario Arias, que “supo del caso por un comisario de Ringuelet que dijo que habían entregado un cuerpo a una funeraria”, informa la nota. Como había informado La Pulseada, García fue velado en la casa fúnebre de 24 e/ 45 y 46, y sus restos fueron trasladados al cementerio Parque de La Plata.
Esta revista también publicó ayer la historia de Alberto José Colombo, un jubilado que murió “de susto” delante de su esposa mientras lo tapaba el agua en Los Hornos. No se ahogó. La Policía consideró injustificado llevar el cuerpo a la morgue. Pero “fue un poco relacionado”, dice Mariana, su nieta. La mujer de Alberto sobrevivió por milagro. Él fue cremado. Y la familia aún intenta “hacer habitable” el hogar y terminar los trámites.
Los 37 y los buscados
Atento a la polémica por las listas y los criterios, en la conferencia de prensa de ayer Scioli repasó las etapas de la comunicación oficial sobre las víctimas: “Desde los primeros momentos y las primeras evaluaciones ustedes han escuchado en boca del gobernador en la medida que fue llegando la información a través del cruce en los hospitales, el registro de las personas, la morgue y el cementerio de La Plata, fuimos dando con seriedad y responsabilidad el número de las víctimas”, que fueron primero 25, luego 45 y finalmente 51, desarrolló.
En tanto, admitió que “hubo 37 personas más fallecidas en la ciudad de La Plata después del siniestro, que son personas que fallecieron por otras causas, no propiamente por la inundación”. Enumeró: “insuficiencia renal aguda, neumonía, cáncer de próstata, síndrome coronario agudo, shock séptico, cáncer de pulmón, leucemia, fibrosis, cáncer, paro respiratorio con internación previa, cáncer de colon. Hubo un caso de quemaduras, de cirrosis, caso de cáncer de lengua, de vía biliar, shock cardiogénico”. Y aclaró: “Lo pueden verificar. Situación en los hospitales públicos: 37 fallecidos entre el 2 y el 7 de abril, 17 ingresaron previamente, y 20 entre el 2 y el 7. Y no se cortó la luz en los hospitales, aclarémoslo”.
Una médica del hospital de Niños consultada por La Pulseada después del mensaje del Gobernador expresó: “Me hacen reír… ¿37 por causas naturales?”. Y en varias casas fúnebres de la ciudad admiten que más allá de las 51 víctimas, en los días posteriores al temporal se solicitaron muchos más servicios que lo habitual.
“Dadas las características de esta tragedia, las condiciones geográficas, sabemos que pueda darse la circunstancia que pueda aparecer alguna denuncia que no tenemos al respecto, desaparecidos en relación directa…”, dijo Scioli, pero afirmó que sólo una mujer está desaparecida. Casi una semana después de la tormenta, no hay noticias sobre el paradero de esta mujer buscada por la Dirección de Personas Desaparecidas. El rostro de Nilda Luján Godoy, de 55 años, que desapareció cuando se encontraba junto a su concubino en su casa de Los Hornos, está en afiches pegados por la ciudad.
Las versiones sobre más “cuerpos” y personas buscadas, que no sintonizan con la información oficial, siguen circulando en desorden e imprecisión por barrios, instituciones y medios de La Plata. Gustavo Rodríguez, delegado general de ATE en el Hospital de Niños de La Plata, le aseguró a La Pulseada que desde que se desató el temporal “vienen familias a preguntar” por chicos que no encuentran y creen que pueden estar internados allí. Esa afluencia de familiares, respondió, no se registra en ningún lado. Eliana Aguirre, también de ATE y trabajadora del hospital, ratificó el testimonio de Rodríguez: “Vinieron padres a preguntar”, sostuvo. No obstante, ambos desmienten categóricamente rumores “disparatados” sobre cuerpos de niños en ese centro sanitario. “Imposible, la morgue es así de chiquitita, este cuadradito”, señalan, y amplían que los decesos que se registraron del temporal a esta parte fueron los normales y “por patologías precedentes”.
