La Asociación de Revistas Culturales e Independientes de Argentina (AreCIA) publicó su primer libro El poder a la imaginación, en el que compila experiencias de sus primeros diez años de historia. Un período en el que la organización se convirtió en la más representativa y duradera entre las publicaciones autogestivas.
El libro se estructura en diez capítulos e involucra a 26 colectivos editoriales que forman o han formado parte de AReCIA.
A través del testimonio de los integrantes de esos proyectos comunicacionales, el objetivo del libro es -además de compartir esas experiencias- trazar un mapa de las publicaciones. Las revistas que aparecen con su testimonio son apenas una parte de las más de 500 que han sido protagonistas de la historia de la Asociación.
El último capítulo contiene un catálogo que amplía ese mapa, con perfiles sintéticos y contactos de las revistas activas censadas en 2021.
“La vieja guardia”, “Gracias por el fuego”, “La fuerza de los márgenes”, “El tren de la autogestión”, “La sorpresa de lo cotidiano”, “La cooperación al poder”, “Del nicho al hecho”, “Revelaciones feministas” e “Inventar lo que no existe”, son los títulos de los capítulos que traslucen los ejes a través de los cuales está organizado el recorrido de esta historia de una década.
“AReCIA supo dar cobijo a revistas de larga data como las que protagonizan el primer capítulo de este libro. Editores y editoras que sobrevivieron la dictadura, la hiperinflación y el corralito”, cuenta en el prólogo Daniel Badenes, quien fuera director de La Pulseada y presidente de la Asociación.
Aquellas experiencias iniciales son contadas en “La vieja guardia”. Y las voces de esos protagonistas aparecen en el segundo capítulo (“Gracias por el fuego”) y en el tercero (“La fuerza de los márgenes”) donde aparecen las publicaciones que surgieron al calor de la crisis y las luchas de 2001.
Allí, junto a La Pulseada se expone la experiencia de Al Margen de Bariloche y Barriletes de Paraná, revistas que no se pueden contar sin dar cuenta de los proyectos sociales que las contienen, cuestión que profundiza el tercer capítulo (“El tren de la autogestión”). “Un hogar para pibes, comedores populares, cooperativas de trabajo, espacios comunitarios. Un verdadero periodismo con los pies en el barro. No es casual que en las principales luchas de AReCIA también se haya sumado La Garganta Poderosa”, recuerda Badenes en el prólogo.
La trama del Conurbano, las experiencias de revistas vecinales, las organizaciones que crecieron como cooperativas y una descripción que opera como declaración de principios de las revistas culturales que se convierten en “lo mejor en lo suyo”, porque su producto editorial no es considerado “una mera mercancía” por sus creadores, son solo algunos de los aspectos que se profundizan en El poder a la imaginación.
“Tres revistas culturales, tres organizaciones sociales, tres sueños. Tres territorios. Y un contexto histórico común: el 2001”. Así arranca el capítulo en el que Lucas Padulla recopila y entrelaza las historias de La Pulseada, Barriletes y Al Margen para contar las estrategias para enfrentar la crisis: “Asociarse con otras y multiplicar los formatos”.
El capítulo arranca con el nacimiento de La Pulseada y su vínculo directo con la primera marcha de Los Chicos del Pueblo en la que el cura Carlos Cajade empezó a dar forma a una respuesta a la necesidad de disputar la agenda de los medios de La Plata desde el punto de vista de la infancia, con el bagaje que implicaba ser el fundador de un hogar que para ese entonces ya era referencia nacional.
“El cura tenía la idea de que había que dar la batalla comunicacional. Con el tema de la niñez, puntualmente, teníamos que tener nuestros propios medios. Los medios masivos estigmatizaban desde la edad de imputabilidad hasta la situación de calle: la mirada era siempre estigmatizante o eran considerados un problema. La idea de la revista fue por ahí: no solo la voz de los chicos del pueblo, sino de poder dar esa pelea”, cuenta Francisco Martínez, uno de los integrantes del equipo coordinador de la revista que dejó de salir en papel en marzo de 2020 y este año sacó una edición impresa especial por sus 20 años.
“La revista comenzó a marcar agenda; las infancias empezaron a estar en tapa. También la desnutrición: chicos con bajo peso en los barrios que no eran parte de ningún abordaje periodístico en La Plata ni en el resto del país”, cuenta Padulla y menciona también la cobertura emblemática de la inundación de 2013, la cual tuvo como corolario la publicación del libro 2A. El naufragio de La Plata.
El salto a la edición web y la larga experiencia de La Pulseada Radio aparecen en escena en el relato. “Nadie, ni siquiera nosotros, pensaba que esto pudiera durar 20 años”, dice Carlos Gassmann, otro de los integrantes del equipo que da testimonio para el libro, además de Pablo Spinelli.
Y completa Martínez: “La revista siempre se levantó de todas las crisis: las políticas, las financieras, la muerte de Cajade, los cambios de gobierno, el macrismo, la pandemia. La pertenencia a AReCIA tiene que ver con esa sostenibilidad: desde la posibilidad de negociar publicidad de manera colectiva hasta el trabajo mancomunado. El trabajo no es en soledad: nos sentimos parte de un colectivo”.
El libro fue realizado en el marco del proyecto “Territorio Cultura: agencia federal y nodos culturales” y fue financiado por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y se distribuye gratis en formato digital.
“Ser una revista cultural independiente representa ser raíz y ser alas, reconocerse en una memoria larga y en un horizonte amplio, donde hay lugar para todas y espacio suficiente para muchas más”, recuerda una de las fundadoras de la asociación, la periodista y escritora Claudia Acuña, en el texto que cierra el libro.
“Ser revista cultural independiente es saberse pocas porque tenemos la dimensión del deseo: queremos siempre más. Ser revista cultural independiente es inventar lo que no existe a partir de lo que hay”, concluye.
Y AreCIA comparte el link para que quien quiera leerlo y reproducirlo citando la fuente lo haga libremente.