El inmueble de Lomas del Mirador donde fue visto con vida por última vez Luciano Arruga se encuentra cerrado y la disputa por su utilización, abierta. La organización Familiares y Amigos de Luciano hace tiempo pide que el sitio, donde funcionaba el destacamento policial, se transforme en un espacio de memoria, pero por el momento ni el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, ni las secretarías de Derechos Humanos de la Provincia y de la Nación han accedido a dicha demanda. Además, desde el organismo señalan que si bien rige sobre el inmueble una medida cautelar dictada para investigar en el marco de la causa judicial, esa investigación nunca llegó a comenzar.
La casa que Familiares y Amigos de Luciano quieren convertir en un sitio de memoria y defensa de los derechos humanos del presente gestionado por organizaciones está ubicada en la calle Indart Nº 106 de Lomas del Mirador. En 2007 se inauguró como destacamento a pedido de un foro de seguridad vecinal y de allí desapareció Luciano, en enero de 2009. El destacamento policial propiamente dicho, en tanto, funciona hoy a tres cuadras del sitio original, que el Municipio de La Matanza continúa alquilando a su dueño y hoy permanece cerrado y sujeto a una medida de no innovar dictada para investigar en el marco de la causa judicial.
El comienzo real de dicha investigación sobre el destacamento, así como la protección sobre el inmueble y su cesión al organismo se encuentran entre los principales reclamos de Familiares y Amigos de Luciano Arruga. La semana que pasó, al cumplirse siete años de la desaparición en democracia de Jorge Julio López, Vanesa Orieta señaló que pronto se cumplirán cinco años de la desaparición de su hermano, Luciano Arruga, y hay quienes «saben más» de lo que han dicho.
