Nota principal: ¡Cuidado, chicos con zoom!
Durante el 5to Festival Comunitario de Video Juvenil (Buenos Aires, 2009), un joven preguntó desde el escenario: “¿Y si hacemos una película entre todos?”. Ése fue el empujón para la idea, ya presente en CEM, de reunir a jóvenes que habían pasado por sus talleres en una producción que “con una impronta de laboratorio audiovisual, nos permitiese producir con mayor libertad”, cuenta Ramiro García, director de cine, licenciado en Enseñanza de los Medios Audiovisuales y coordinador general de CEM.
En este documental, el desafío “apunta a romper con el modelo de producción piramidal, típico del cine industrial, incentivando el trabajo grupal desde una lógica horizontal —sostiene García—. Para ello, cada grupo de jóvenes se llevó una cámara para registrar a su manera su mundo, sus relaciones y sus sueños. Pensamos que democratizar el hacer cine tiene que ver con transformar la tecnología en una herramienta de reflexión y producción de sentidos de vida, tomando la educación popular como método para trabajar”.
“Como egresado de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (que depende del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales) y en el contexto de la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, creo que este proyecto significa una posibilidad para promover espacios de producción audiovisual con contenidos elaborados desde y con los sectores populares —continúa el coordinador—. Desde CEM creemos que debemos avanzar en la producción desde los márgenes, desarrollando una alfabetización digital que favorezca la toma de la palabra sin que ésta sea mediada por los intereses de ninguna empresa de comunicación”.