Nota Central > Por más acceso a la educación para trans y travestis
Por A. L.
Por la pandemia y la decisión del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio las necesidades básicas de las personas trans y travestis en la región se vieron claramente afectadas, profundizando las condiciones de vulnerabilidad. Las organizaciones sociales y civiles se orientaron a resolver desde el primer día la demanda de alimentos y productos de higiene y acercando los reclamos al Estado Provincial.
Daniela Castro está a cargo de la Dirección de Provincial de Políticas de Diversidad Sexual. Es la primera funcionaria trans de la provincia y asumió su cargo en enero: “La idea desde el primer momento fue asistir en lo inmediato en este contexto de pandemia. Pero luego de asumir mi gestión, ya teníamos más o menos una agenda organizada de cómo íbamos a trabajar durante el año que la verdad que era muchísimo. Apareció el coronavirus y tuvimos que empezar a ver cómo modificábamos esa agenda sin perder la posibilidad de generar política pública, por supuesto, porque entendemos que esto, más tarde o más temprano, va a pasar, y no nos tiene que encontrar sin haber generado absolutamente nada o arrancando desde cero, pero teníamos que atender lo inmediato”.
Lo inmediato fue alimentos y la situación habitacional. La funcionaria afirmó a La Pulseada que los primeros días de cuarentena se orientaron a resolver “la gigantesca demanda de alimentos que empezamos a tener por parte de la población LGTB, pero principalmente desde el colectivo travesti trans, entendiendo que lamentablemente muchas de ellas están atravesando situaciones de prostitución, entonces no tenían posibilidad de salir a generar este sustento, que les permitía subsistir, pagar sus alquileres”.
Desde AMMAR, Valentina Pereyra, referente de la organización en La Plata y la región, explicó que “con la pandemia nos preocupa más lo habitacional, en relación a poder hacer la cuarentena en un lugar que tenga las condiciones básicas para la asepsia. Es fácil decir ‘quédate en casa’ pero, cuando no tenés una casa ¿qué hacés? Y nos pasa mucho a las compañeras trans travestis, y si son migrantes aún más, porque representa un obstáculo a la hora de poder acceder a alguna ayuda del Estado”.
AMMAR inició en marzo una campaña de donación a nivel nacional para sostener con alimentos y productos de higiene a sus compañeras: “Sabíamos que esto venía para largo que no iban a ser sólo 15 días y que las compañeras usaban sus pocos ahorros para comer y solventar los gastos habitacionales que tenían”. Actualmente, los fondos que recaudan son para cubrir los gastos habitacionales por los alquileres. Valentina explica que “si no tenés documentos, no podés justificar tu ingreso y si encima sos trabajadora sexual, los dueños se abusan, y caemos en alquileres que se acuerdan de palabra, y no pueden hacer valer que hay un decreto nacional. A veces, los dueños de los hoteles te dicen ‘te espero un mes, dos meses’, pero en otros casos no entienden”. El Decreto N°320/2020 del Gobierno Nacional establece la suspensión de los desalojos a inquilinos hasta el 30 de septiembre, en el marco de la pandemia por coronavirus.
Al respecto, Daniela Castro afirmó: “Teníamos que trabajar para ver de qué manera lográbamos insertar a esas compañeras dentro del sistema y frente a la urgencia, una de las primeras cosas que hicimos fue articular con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, para generar programas como el Potenciar Trabajo. Eso lo armamos en el mes de abril, los primeros días, de forma inmediata y logramos insertar a más de 600 compañeras que ya en el mes de junio están cobrando su segundo mes de salario del Potenciar Trabajo. Dentro del contexto fue una bocanada de oxígeno porque la demanda era muchísima y, si bien, claramente con eso no pueden vivir, era una respuesta, por lo menos frente a la demanda de no poder pagar sus alquileres para no terminar en situación de calle”.
Las organizaciones y movimientos sociales siguen reuniendo alimentos, productos de higiene y haciendo campañas para sostener económicamente a las personas trans y travestis
El programa establece un estipendio de 8.500 pesos por mes, y se están pensando estrategias de inserción laboral para sostenerlas dentro de esta iniciativa, luego de la cuarentena: “Creo claramente que esto va a terminar en el armado de cooperativas de trabajo donde las compañeras puedan desarrollarse y que eso sea un complemento de un ingreso mucho mayor y mucho más digno”, agregó Castro.
Mientras tanto, las organizaciones y movimientos sociales siguen reuniendo alimentos, productos de higiene y haciendo campañas para sostener económicamente a las personas trans y travestis. Actualmente, desde Furia Travesti impulsan una campaña de donación de alimentos y abrigo para las personas trans y travestis de la región: “Necesitamos ayuda de todes. Estamos recibiendo donaciones de alimentos, verduras, productos de limpieza e higiene, garrafas, estufas, frazadas, abrigos, dinero”, afirman en la convocatoria. Por su parte, AMMAR La Plata lleva adelante una colecta de alimentos: “Estamos recolectando frutas, verduras y carnes para asistir a nuestrxs compañerxs en la pandemia”.
Pereyra describió los modos que tienen de articular entre varias organizaciones: “Lo importante para nosotras en este momento es resolver las urgencias de las compañeras. Según el último relevamiento interno, que lo hicimos el 2 de junio, en La Plata había más de 600 compañeras en las listas para recibir alimentos y productos de higiene. A fines de marzo, cuando inició el aislamiento obligatorio, eran 60 nada más. Por eso, tratamos de coordinar con referentes de otros espacios, como Furia Travesti, para repartirnos las tareas: al no tener tantos permisos, no podemos ir todas al mismo tiempo y es fundamental el trabajo coordinado”.