Florencia Saintout, candidata a intendenta por el Frente de Todos.
Nota central > Qué se propone para la niñez en la región
–¿Tiene un diagnóstico sobre las políticas locales existentes para el abordaje de la niñez en riesgo?
–Creo que es urgente ponernos a trabajar en esta área. Si hay un sector que fue golpeado por estos años de gobierno de Cambiemos fueron los niños. Hoy en la ciudad hay pibes que no pueden tomar un vaso de leche, el vaso de leche fue reemplazado por mate cocido. No podemos permitir más que esto suceda. Entonces creo que es urgente ponernos a trabajar desde el municipio con políticas integrales que permitan llegar primero que nada a esos pibes y esas familias a las que hoy les falta lo elemental, el plato de comida. Es indispensable fortalecer junto con la Provincia los comedores escolares que hoy destinan solo 27 pesos por pibe. No se puede pensar en un proyecto de ciudad si los más chicos no tienen lo básico para proyectarse.
–¿Cómo piensa definir las políticas en el área de niñez? ¿convocaría a un trabajo de las distintas áreas (salud, acción social, etc) junto a las organizaciones fortaleciendo el Consejo Local de Niñez? ¿Puede haber una jerarquización como secretaría?
–Nosotros entendemos que el Consejo de Niñez es un órgano fundamental de la Ley provincial, en tanto entiende la participación de los distintos actores sociales, políticos e institucionales para el desarrollo pleno de una niñez con derechos y garantías. En este sentido creemos que es necesario que la Municipalidad participe y se comprometa, fortaleciendo al Consejo a través de las áreas más sensibles: desarrollo social, cultura, salud. De la misma manera pensamos que una comisión específica de niñez en el concejo deliberante debería poder tener instancias de articulación con el concejo local.
–¿Cree que es necesario y es posible la creación de una comisión de niñez en el ámbito del Concejo Deliberante?
–El Concejo Deliberante debería tener una Comisión de Niñez específica. Al día de hoy las problemáticas específicas del área se siguen tratando en la Comisión de Seguridad, lo que da cuenta de la visión punitivista que reina en torno al abordaje de las políticas públicas en niñez. No tengo dudas de que nuestros concejales vayan a legislar en el sentido del proyecto que nos hemos planteado, es decir, de políticas públicas de inclusión para un desarrollo integral de nuestra ciudad, y cada uno de los que la habitan.
–¿Qué acciones concretas piensa a aplicar para contener a las y los chicos en situación de calle? ¿Qué piensa de la intervención policial en estos casos?
–Necesitamos un programa específico de niñez en situación de vulnerabilidad riesgo (situación de calle) para que no haya un solo pibe más en la calle, si resolvemos esa situación es menos factible que haya jóvenes y niños/as en conflicto con la ley. La igualdad se crea a través del acceso a derechos. Hoy tenemos un gobierno que invisibiliza las demandas urgentes de muchos ciudadanos. Los pibes no son sólo el futuro, son el presente, no podemos permitir que haya niños y niñas en la calle expuestos a las más grandes vejaciones, a la violencia y la explotación. Los pibes tienen que estar en la escuela, tienen que tener garantizado el acceso a las cuatro comidas diarias, a una salud de calidad. Para contener a los chicxs en situación de calle tiene que existir un programa de operadores de calle, con presencia en cada barrio. Esos operadores con formación específica en niñez y adolescencia son quienes se tienen que constituir en referentes significativos para esos niños y jóvenes. Se debe establecer un vínculo entre ellos, debe haber acompañamiento real y efectivo, los pibes no pueden ser números, ellos deben gozar de todos los derechos de los cuales son titulares. Para ello es necesario financiamiento, recurso humano con la formación más elevada, centros de día y paradores para ir trabajando en el marco de un proyecto de acompañamiento la situación de vulnerabilidad de cada pibe, con estrecha articulación y corresponsabilidad con todas las áreas del Estado y organizaciones barriales.
“La Municipalidad administra programas provinciales, pero no tiene un nivel de intervención propio, con recursos propios, para las necesidades propias”
–¿De qué forma abordaría a niños/as y jóvenes en conflicto con la ley penal?
–Como primera instancia la implementación de la ley 13.298 y la ley de Responsabilidad Penal Juvenil 13.634 deben ser acciones y políticas públicas para garantizar sus derechos, teniendo en cuenta el interés superior del niño. La ley es un texto y un contexto. Toda política pública destinada a niños y adolescentes debe tener un enfoque de derechos. Debemos revisar la intervención del Estado con los niños, las acciones y sus omisiones son parte de la política. Deben funcionar todos los órganos que la ley establece, se deben revisar las categorías y las prácticas institucionales. Tiene que haber un proyecto político, social, cultural, académico, institucional que sea garante de los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Es necesario fomentar el sentido de responsabilidad del niño y orientarlo en un proyecto de vida digno, con acciones educativas que se complementen con la intervención de la familia, la comunidad y el Municipio, con el apoyo de los especialistas idóneos. Se tiene que contar con orientación y apoyo socio-familiar, asistencia especializada, inclusión escolar y de salud de ser necesario. Inclusión prioritaria en los programas estatales.
–¿Cómo evalúa al funcionamiento de los Servicios Locales? ¿Qué propone para mejorarlos?
–Los servicios locales fueron una muestra del desprecio de esta gestión hacia las políticas públicas de inclusión. Han sido desmantelados en muchos casos y sus trabajadores, han trabajado en condiciones lamentables. Cuando han pedido mejores condiciones, los despidieron como forma de disciplinamiento. Necesitamos rejerarquizarlos, porque entendemos que son un pilar muy importante de la Ley provincial de Protección integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, en tanto son el ámbito de intervención territorial más urgente. Necesitamos integrar los niveles técnicos que la misma Ley plantea, dotarlos de recursos para garantizar su funcionamiento y multiplicarlos en los distintos barrios de la ciudad.
–¿Piensa abrir nuevos servicios? ¿Qué propone para garantizar operadores de calle las 24 horas?
–Se trata de lograr que estos ámbitos de intervención sobre las problemáticas más urgentes funcionen articuladamente en todo el territorio. La distribución actual de los servicios locales no responde a una mirada estratégica e integral. Hay extensas zonas del territorio que están desguarecidas de esta política pública que es esencial. Incluso partiendo de la infraestructura que hoy tiene la Municipalidad, podemos hacer que funcionen servicios locales en todos nuestros barrios, obviamente dotándolos de las condiciones que hagan posible su desenvolviemiento. Algo parecido pasa con los operadores de calle. Nosotros soñamos con una integración plena de articulación entre Nación, Provincia y Municipio. La Provincia, de la mano de María Eugenia Vidal, ha degradado la intervención del área a un organismo desfinanciado. Si la niñez y la adolescencia son los actores más vulnerables de esta crisis, y tanto los servicios locales como los operadores de calle son dos políticas públicas que intervienen fuertemente en esta problemática, es claro que este diagnóstico nos debe llevar a repensarlos en función de una decisión política que hoy falta.
–¿Qué medidas tomaría para garantizar una mejora en las condiciones laborales de los y las trabajadoras de los servicios de niñez?
–No podemos tener más a las personas trabajando en condiciones de precariedad, es necesario que podamos trabajar todos por garantizar creación y fuentes de empleo genuinas y mejorar las condiciones y los salarios de aquellos trabajadores a los que hoy no les alcanza, que no acceden a las cosas indispensables para la subsistencia.
–¿Cómo abordaría un seguimiento permanente por parte de los servicios locales y programas provinciales a las situaciones familiares de chicos y chicas que asisten a los centros de día y viven en los hogares convivenciales?
–El abordaje permanente debe ser monitoreado por las distintas instancias de articulación política, social e institucional. Es claro que la responsabilidad política está en el Ejecutivo municipal a través de sus áreas específicas, pero a su vez, se necesita de la intervención de la red de actores y organizaciones que intervienen cotidianamente. Esto va a necesitar seguramente, de ámbitos específicos en los que estos niveles puedan articular derivaciones, intervenciones, seguimientos, y fundamentalmente la reinserción comunitaria
“En los últimos años fuimos testigos de cómo desde la prensa, y desde los gobiernos también, se generó un discurso de estigmatización”
–¿Que propuestas tendría desde la Municipalidad para acompañar el trabajo de las organizaciones no gubernamentales que contienen a la niñez?
–El sistema de corresponsabilidad con el que se pensó la Ley de Niñez provincial compromete a todos los sectores a trabajar articuladamente. Y estamos muy de acuerdo en esto. Las organizaciones que contienen a la niñez son en realidad el entramado social en el que se desarrollan nuestros niños, niñas y adolescentes en un sentido amplio. Las organizaciones sociales, las instituciones educativas, los clubes, la Iglesia, los comedores, los centros culturales, las bibliotecas barriales y obviamente el ámbito político municipal, deben trabajar articuladamente para garantizar un desarrollo pleno de derechos. Nosotros mismos, somos miembros de estas organizaciones, así que sabemos de la necesidad de articulación con el ámbito gubernamental. Los ámbitos existen, pero hay que potenciarlos. Por ejemplo, deberíamos fortalecer las mesas barriales y técnicas de niñez, reconocidas en la Ley de Niñez provincial vigente.
–Sería posible fomentar medidas para garantizar un salario a los trabajadores?
–El trabajo tiene que ser remunerado, por supuesto, para poner en valor las tareas que se realizan. Creo que es posible desarrollar un programa de gobierno que tenga a las políticas públicas como eje fundamental de gestión.
–¿Qué aporte financiero destinaría para sostener el trabajo que se lleva a cabo en estas organizaciones y cómo llegaría?
–Hay algo básico aquí que debería ser un piso desde el que se parte. El gobierno actual, lejos de potenciar el desenvolvimiento de las organizaciones, las ha estrangulado. Ha deteriorado los comedores, ha puesto tarifazos impagables a los clubes. Este modelo está agotado. A partir de aquí, nosotros queremos dejar claro que pensamos a la organización no como un problema, sino como la forma que adquiere la sociedad para lograr una mayor integración social, y como la garantía de su progreso colectivo. Debemos trabajar articuladamente escuchando, para potenciar en todo sentido los niveles organizativos.
–¿Cómo cree que se cubren las noticias vinculadas a la niñez? ¿conoce la existencia de protocolos para su abordaje? ¿tomaría medidas si se incumplen?
–Es necesario que podamos contar con medios de comunicación plurales y con responsabilidad social al momento de comunicar. En los últimos años fuimos testigos de cómo desde la prensa, y desde los gobiernos también, se generó un discurso de estigmatización de un montón de sectores. Hay que trabajar por poder romper con un montón de prejuicios impuestos, de falsas verdades impuestas desde los medios de comunicación hegemónicos que no aportan en nada a la sociedad, que buscan dividirnos, atomizarnos, que pregonan la salvación individual y el temor al otro, para seguir garantizando sus privilegios y sus intereses en detrimento del bienestar comunitario. Como en su momento lo fue la AFSCA, sería bueno contar con un organismo estatal que se encargue de prestar especial atención a lo que se comunica y que garantice una comunicación plural y diversa que no vulnere derechos ni discrimine a nadie.
–¿Cómo empezaría a incorporar, difundir y escuchar la voz de los niños como colectivo que tiene características propias que deben ser tenidas en cuenta?
–Debemos contar con espacios de comunicación en donde sus reclamos, sus preguntas y sus visiones sean escuchadas y respetadas. Sería bueno contar con espacios para que los niños puedan expresarse. Por eso insisto en que es fundamental contar con espacios de participación colectiva en los barrios, con espacios de puesta en común y debate para conocer qué piensan, qué opinan, en qué se sienten vulnerados, qué es lo que los interpela. Debemos trabajar para que sepan que tienen voz y que sus demandas son escuchadas y respetadas. La niñez no se puede resolver sólo desde políticas específicas sino desde un proyecto político de inclusión social en la que se garantice el trabajo y el acceso a los bienes del conjunto de la sociedad. No se puede pensar a la niñez solo desde políticas aisladas.