Foto: Claudia Gaudelli
Cada una de estas deportistas tiene su propia historia, pero un punto en común. No vienen de familias convencionales, ni de casas con jardines, ni departamentos con balcones. Este pasado que las identifica, las sitúa en un presente donde el sacrificio, el respeto y amor por el boxeo forman parte del aire que respiran. Saben que si no cumplen las reglas no escritas de este deporte, el cuadrilátero se los va a cobrar. Pero para todas estas valientes mujeres, el boxeo es un arte: el arte de golpear y no dejarse golpear.