Se cumplen 40 años de la Nochebuena en nació la obra del Padre Cajade y los pibes y las pibas los celebraron en Plaza Moreno.
Fotos: Sofia Rognone y Gabriela Hernández
Plaza Moreno fue escenario de la emotiva celebración para conmemorar los 40 años de la obra del Padre Cajade, el proyecto solidario que creció sin parar desde la Nochebuena de 1984 y transformó la vida de miles de niños y jóvenes, dejando una huella imborrable en La Plata.
Fue el sábado 21 de diciembres, cuando en el lugar se instalaron puestos que mostraron la historia de los distintos emprendimientos creados en estas cuatro décadas.
Además hubo una merienda comunitaria y se presentó la Orquesta de la Casita de los Niños. La voz del cura desde los parlantes y las permanentes referencias a su trabajo lo tuvieron presente a lo largo de toda la jornada y renovaron su legado. El cierre fue con un emotivo pesebre viviente protagonizado por educadores y niños de la Obra.
El pesebre de Carlitos
La historia del Hogar del Padre Cajade, bautizado como Hogar de la Madre Tres Veces Admirable, comenzó en Nochebuena de 1984 en Berisso.
Aquella noche Carlitos cambió su cena familiar para ayudar a tres chicos en extrema pobreza, dando inicio a un camino de solidaridad que marcó su vida y la de cientos de personas que en algún momento se sumaron a su trabajo.
Después de la Misa de Gallo del 24 de diciembre de aquel años, en la Iglesia San Francisco de Asís de Berisso se dirigió al atrio para saludar a sus fieles y desearles una feliz Navidad. Allí lo esperaba tres hermanitos para preguntarle qué era la Navidad. Cajade decidió esperar a la medianoche con ellos y con esa decisión estaría definiendo su propio camino para el resto de vida.
Con esos tres nenes nació el Hogar de la Madre Tres Veces Admirable. Poco después, Sandro, Margarita y Fernando empezaron a llevar a sus amigos. La casa parroquial quedó chica y comenzaron las gestiones para conseguir un sitio más apropiado. En 1986 se mudaron a 643 entre 12 y 13, en el Barrio Aeropuerto, donde sigue funcionando.
Una obra que transformó vidas
Desde su fundación, la obra creció para responder a las demandas de un contexto social complejo. A lo largo de los años, se sumaron proyectos como las Casas de los Niños, la Casa de los Bebés, Casa Joven, una chacra, una panadería, una imprenta, la revista La Pulseada, un kiosco en la Legislatura o la orquesta.
Hoy, aquellos niños y jóvenes que encontraron en la obra un hogar y oportunidades, se convirtieron en dirigentes sociales, educadores y agentes de cambio, perpetuando el legado de Cajade.