El arzobispo de La Plata Gustavo Carrara visitó este sábado el Hogar de la Madre Admirable, fundada por el padre Carlos Cajade, para conocer las casitas y escuchar a los educadores que llevan adelante una obra para chicos en situación de vulnerabilidad desde hace 40 años.
A lo largo de toda la tarde, Carrara escuchó cómo se trabaja, conoció las actividades en las casitas y las estrategias de contención que se dan tanto en el Hogar como en Casa Joven, la Casita de los Bebés, Chispita y la Casa de los Niñxs.
Hubo recorridas por todo el predio de 643 y 13 y contacto con los chicos y las chicas en el playón donde practican deportes.
Uno de los momentos más emotivos se dio cuando el arzobispo llegó a la ermita, donde están los restos de Cajade, donde Carrara escuchó la historia de la decisión de trasladar el cuerpo desde el panteón que la Iglesia tiene en el Cementerio de La Plata. El Arzobispo también conoció la historia de la capilla y su reconstrucción cuando la estructura se deterioró.
El Arzobispo contó cuál ha sido su actividad pastoral de que asumió en La Plata y hablo de su trabajo previo en la Villa 1-11 14 y en la Zavaleta.
Después de la recorrida, al encuentro se sumaron representantes de los Chicxs del Pueblo de la Regional La Plata, a quien el sacerdote también escuchó y con quienes intercambió ideas. Coincidieron en que el trabajo deber ser comunitario entre las organizaciones sociales y el Estado.
Como corolario del encuentro, Carrara se ofreció a volver para bautizar a los hijos de educadores que aún no lo están y fue invitado al momento más importante del año para el Hogar, que es el tradicional pesebre viviente del 23 de diciembre de cada año.