Bajo ese lema, estudiantes del Liceo Víctor Mercante realizaron jornadas de reflexión
Por M. Soledad Vampa y Francisco Martínez
Nota principal: En la puerta de su casa
La noticia del crimen de Lucía Ríos llegó al Liceo Víctor Mercante, donde cursaba en el 3° año “D”, el mismo día del asesinato. El colegio se declaró en duelo durante dos días, luego se realizaron jornadas extraordinarias de reflexión y finalmente desde la dirección, con el acompañamiento del Rectorado de la UNLP, se convocó a la marcha del 26 de septiembre. Mientras se preparaba con sus compañeras para partir, bajo la lluvia, en la marcha por #Niunamenos del 19 de octubre, Florencia Serroels, coordinadora del Centro de Estudiantes, contó a La Pulseada cómo fueron esos días.
–¿Cómo recibieron la noticia de la muerte de Lucía?
–La noticia la recibimos el 16 de septiembre, ese mismo día, cuando nos estábamos preparando para la marcha de La Noche de los Lápices. Fue terrible, en la institución nunca se supo nada que ella sufriera violencia de género, en el centro de estudiantes tampoco. Ese día para la marcha tuvimos el luto en la bandera.
–¿Cómo fueron las jornadas de reflexión y qué cosas surgieron desde ustedes?
–El viernes y el lunes se suspendieron las actividades. El martes realizamos dos asambleas extraordinarias. Recopilamos ideas y propuestas y los chicos decían que faltaba información. Que la Ley de Integridad Sexual no se estaba implementando, y que si se implementa se abarca muy poco. Creemos que va de la mano de desnaturalizar ciertas cosas. Por eso decidimos hacer una jornada el día viernes (siguiente al homicidio) que se llamó “Desnaturalicemos la violencia, justicia por Lucía”, en la que se habló de muchas cosas. Si bien la mujer recibe cierta opresión, los hombres también la reciben por los estereotipos. Entonces hubo un gran intercambio sobre estas cuestiones, fueron charlas dentro del Colegio y afuera cortamos la calle e hicimos talleres para hacer stencils, parches, sacamos fotos. Se suspendieron las clases de 10.30 a 15.10 y durante todo el resto de la semana en las aulas se estuvo hablando. Algo bueno que hay en el Colegio y que hay bastante pluralidad de ideas, y lo bueno es poder transmitir lo que uno tiene información
–¿Qué receptividad tuvo en los docentes esas inquietudes?
–Sí, ellos también participaron, tuvieron primero una charla entre docentes. Es como todo: hay algunos docentes a los que les interesa y hay otros que no. Algunos venían con material, nos hacían debatir situaciones y otros que llegaban y preguntaban “¿tienen algo para decir? ¿Sí, no?. Listo, seguimos con la clase”.
–¿Y cómo surgió la idea de la marcha?
–En las asambleas extraordinarias. Lo bueno que lo hicimos en conjunto con la institución, fue un gran apoyo de la UNLP porque estuvo toda la comunidad educativa de pregrado: el Liceo, el Nacional y el Bellas Artes juntos, marchando, cosa que no pasaba hace bastante tiempo. Apoyo de otros colegios, de la Coordinadora, hubo 3 mil personas. Estamos nucleados en la Coordinadora de Estudiantes de Base, de quienes siempre tuvimos apoyo de ellos y de las otras coordinadoras de estudiantes.
–¿Qué reacciones hubo con el caso de Mar del Plata?
–El día del paro nacional de mujeres, desde la institución se promovió que las mujeres del turno mañana, que salimos 12.40, hagamos algo, no nos queríamos quedar afuera. Así que vinimos todas vestidas de negro y nos sacamos una foto. Surgió la idea de porqué las mujeres y no los hombres. La idea fue que se sienta la ausencia de las mujeres en el aula, la realidad es cada vez somos menos porque nos matan más. Puede pasar que alguna compañera ya no esté, como le pasó al curso de 3°D.