Aunque ya parecen demasiado lejanas, más de cincuenta pibes, educadores y tutores todavía recuerdan las merecidas vacaciones que finalmente tuvieron luego de una larga temporada en el Hogar. El Embalse de Río Tercero fue el lugar elegido, en la siempre linda provincia de Córdoba. Durante una semana que pasó volando, chicos y grandes disfrutaron del calor, combinando paseos por el río, tardes de pileta, excursiones a caballo y hasta pesca. El viaje, la estadía completa y los gastos fueron cubiertos por el Ministerio de Desarrollo de la Nación, gracias a la desinteresada gestión Ana y Carlos.