Ángel Azul es un hogar convivencial ubicado en el corazón del barrio Hipódromo (117 e/ 36 y 37) y otra de las instituciones que convoca a marchar con la niñez el 27 de septiembre. Brinda cuidado y contención a chicos y chicas que, por diferentes motivos, no pueden contar con su entorno familiar.
«Nuestra historia se remonta al 2000, cuando Elena Vita -actual responsable del hogar- intentó encontrarle un nuevo sentido a su vida después de un doloroso episodio familiar. En ese momento visitó un hogar de niños y entendió que su horizonte era abrir las puertas de su casa y su corazón a chicos y chicas que se encontraban en situación de vulnerabilidad, con carencias de todo tipo.
Claro que no fue fácil y aún hoy todavía cuesta. Pero a pesar de los contextos y las realidades, jamás dejamos de ofrecer todo lo que implica un entorno familiar como nosotros lo entendemos: lleno de amor, respeto y cuidado.
Actualmente, los chicos y chicas que pasan por el hogar son de edades muy variadas, desde bebés hasta 12 años, y todos ellos conviven en un clima de unión y fraternidad. Van al colegio, juegan, comen las cuatro comidas diarias y reciben toda nuestra atención. Las puertas siempre estuvieron abiertas, y llegamos a recibir hasta 28 chicos de manera simultánea”.
En el hogar Ángel Azul, 5 adultxs alojan de ternura, risas y abrazos a 26 pibxs dispuestxs a torcer el destino de la tierra negada, el techo postergado y el pan mal repartido. La realidad de esta organización no es ajena al resto de los hogares convivenciales de la ciudad. El Estado carga sobre las espaldas de estas instituciones la tutela y responsabilidad social, postergando su deber y compromiso económico.
La necesaria cobertura social para lxs pibxs institucionalizados, el diálogo permanente y el continuo trabajo en territorio son urgentes. Actualizar el monto de las becas conveniadas con la Provincia de Buenos Aires es tan urgente como el reconocimiento de lxs trabajadorxs comunitarios que dedican sus días acompañar los proyectos de vida de la pibada que el país de la intemperie no quiere abrigar.
El jueves 27 de septiembre convocamos a marchar junto a más de 30 organizaciones de La Plata, Berisso y Ensenada que trabajan con niños, niñas y adolescentes.
El hambre es un crimen.
Marchamos.